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Lo que viene para el dólar blue

El dólar blue y los financieros experimentan movimientos a la baja, pero los expertos anticipan que la tendencia predominante seguirá siendo alcista debido al tipo de cambio oficial estancado, la alta inflación y las expectativas de devaluación para marzo o abril. Observan que la demanda de dinero suele disminuir a partir de marzo y abril, lo que podría generar un aumento en el dólar. Se estima que un nivel de brecha del 40% al 50% sería razonable, y que si el precio baja de ciertos umbrales, la brecha se eliminaría y surgirían más compradores. Se menciona un posible piso del dólar blue entre los $1.000 y $1.050, pero su futuro dependerá del flujo de dólares, el plan de licuación y la cosecha en los próximos meses

Tensión Resuelta: Pymes Importadoras Inician Pagos tras Acuerdo Gobierno-Industria

Tras la reunión entre la CAME, el BCRA y la Secretaría de Economía del Conocimiento, unas 10 mil pymes importadoras han comenzado a saldar deudas y reencauzar vínculos con proveedores. CAME considera esta decisión del Gobierno como fundamental para ordenar los pagos privados y proporcionar certidumbre. Se permite a importadores con deudas hasta el 13/12/2023, no superiores a US$ 500.000, iniciar pagos a proveedores desde el 14 de febrero, siguiendo un esquema específico de cuotas

Exportaciones: La silenciosa entrega de la soberanía y el control

Las decisiones del Ejecutivo de entregar el control de las exportaciones al puerto uruguayo, sumado a otras decisiones desregulatorias que se preanuncian para los próximos días a través de un nuevo DNU del cual se habla mucho, preanuncian momentos difíciles para la cosecha de divisas por parte del Central y la economía argentina. Vía libre para triangulaciones, caída de los pronósticos de cosecha por el intenso calor y atraso cambiario evidente con una inflación que en el primer trimestre puede cerrar cerca de los 60 puntos ( más los 25 de diciembre) trazan un cóctel peligroso para la política de acumulación de reservas que viene llevando adelante el BCRA (por ahora comprando dólares que, fundamentalmente, están saliendo de los ahorros de empresas y ciudadanos) y que espera magnificar con la cosecha y liquidación. A favor tiene el Gasoducto Nestor Kirchner que significa un ahorro de más de 5000 millones de dólares respecto al año pasado. El escenario era ideal para cualquier mandatario, gracias a la cosecha y ahorro de energía, significarán casi 25 mil millones de dólares más respecto a 2023. Hay que ser muy libertario para chocar en ese circuito. Es lo que está haciendo este gobierno, romper en pedazos una oportunidad de oro para la Argentina. Si a ese panorama sumamos un mercado interno que la política del gobierno destruye a paso redoblado (recordemos que el mercado interno significa tres cuartos del PIB argentino) el horizonte es un eclipse total de sol para un país que precisamente tiene al astro como el centro de su bandera.
 
 

Cómo el Smart Money analiza las oportunidades en la antesala de una recesión

En el complejo panorama de los mercados globales, diversos segmentos económicos desempeñan roles esenciales en el desarrollo del comercio y las inversiones. Destacan sectores como la tecnología, clave para la innovación y el avance digital; el sector de consumo, enfocado en productos y servicios para hogares; y el sector servicios, que incluye áreas críticas como la salud y la educación. Charles-Henry Monchau, Director de Inversiones de Bank Syz, indica que los mercados financieros atraviesan una transformación significativa. Esta nueva etapa se caracteriza por una diversificación en el liderazgo del mercado, alejándose de la dependencia de las grandes tecnológicas, conocidas como “Los siete magníficos”: Apple (NASDAQ:AAPL), Amazon (NASDAQ:AMZN), Alphabet (NASDAQ:GOOGL), Meta (NASDAQ:META), Microsoft (NASDAQ:MSFT), Nvidia (NASDAQ:NVDA) y Tesla (NASDAQ:TSLA). Estas empresas, que representan cerca del 30% del capital total del índice S&P 500, han sido pilares del mercado, pero ahora se anticipa un cambio. Monchau prevé que Estados Unidos enfrentará una recesión técnica en la primera mitad del año, aunque sin un aterrizaje duro, seguida de una recuperación económica. A pesar de la presión sobre las grandes acciones tecnológicas, el mercado en general continúa mostrando signos de un mercado alcista, con mejor rendimiento de sectores menos destacados en 2023, como los financieros, energía y salud. Scott Wren, estratega global de mercados senior en Wells Fargo (NYSE:WFC), comparte esta visión. Wren recomienda a los inversores reasignar fondos de sectores con alta valoración, como Tecnología de la Información, Consumo Discrecional y Servicios de Comunicación, hacia sectores que liderarían la recuperación económica, como Industriales, Materiales y Salud. Él anticipa un mercado de valores volátil en medio de la desaceleración económica, seguido de una recuperación en la segunda mitad del año y continuando en 2025. La expectativa de oportunidades en la antesala de una recesión, junto con el inicio de un ciclo de reducción de tasas de interés por la Reserva Federal, configura un escenario de inversión propicio. Esta combinación de factores nutre una visión estratégica de inversión, aprovechando los cambios en las condiciones del mercado. Este nuevo enfoque en el mercado sugiere un desplazamiento de la fuerte concentración en las grandes empresas tecnológicas hacia una mayor diversificación sectorial, un cambio considerado por los expertos como una rotación saludable y necesaria para un mercado más equilibrado y resiliente. En el ámbito de las inversiones, particularmente en periodos de incertidumbre económica, tener una perspectiva crítica y analítica es esencial. Más que una virtud, es una estrategia clave. Los inversores con experiencia saben que es fundamental resistir la tentación de reaccionar a las fluctuaciones del mercado. Conservar la serenidad y saber esperar el momento adecuado son habilidades que permiten capturar las oportunidades a largo plazo, aprovechando los cambios en las condiciones del mercado. En estos tiempos de transformación de los mercados, donde la incertidumbre parece ser la única constante, la sabiduría se pone a prueba. Navegar en aguas turbulentas requiere no solo conocimiento y estrategia, sino también una visión largoplacista y adaptable. Quienes logran leer entre líneas las señales del mercado, manteniendo un enfoque equilibrado y una mente abierta a la diversificación, podrían descubrir no solo la clave para sobrevivir en este entorno cambiante, sino también el camino hacia los mejores resultados.

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